Si bien las aplicaciones más exitosas para la entrega de alimentos son eficientes, sus comisiones en ocasiones resultan elevadas; por ello, tanto usuarios como restaurantes se están explorando otras opciones.
La llegada del virus SARS-CoV-2 a México trajo consigo una serie de medidas restrictivas de contención que afectó en gran parte al comercio del país, siendo uno de los más afectados la industria restaurantera.
Según un estudio realizado por el portal Fintonic, se registró una caída del 74 por ciento en el consumo en México, esto significa que los restaurantes del país están experimentando una verdadera tragedia, pues mientras más días pasan del confinamiento en el país, más restaurantes se están viendo obligados a cerrar sus puertas de forma definitiva, sin importar su antigüedad o tradición, según datos del CANIRAC se estima que cerca del 20 por ciento no volverá abrir.
No obstante, dentro de la desgracia que está viviendo el sector restaurantero, muchas empresas han puesto en marcha el modelo de low touch economy para rescatar de alguna forma a los negocios para que puedan llegar a sus clientes habituales en tiempo real y con el mínimo contacto necesario.
Si bien la entrega de comida a domicilio no es algo nuevo, teniendo el claro ejemplo de los repartidores de pizzas por decir alguno, las aplicaciones móviles para la entrega de comida se ha vuelto una solución exitosa e interactiva, además de ser muy fácil de utilizar.
Mientras el consumo sitio, es decir, directamente en el restaurante ha tenido una caída, la entrega de comida mediante apps ha subido un 80 por ciento, y entre los principales proveedores de este servicio están Uber Eats y Rappi.
La reinvención de la apps
Sin embargo, en México empresas de startup más pequeñas, se preparan para hacerle frente a estas plataformas debido a la queja de los restauranteros por el incremento en las comisiones tras el comienzo de la pandemia.
Otra de las grandes ideas en crecimiento son las aplicaciones para reducir el desperdicio de comida en restaurantes, un ejemplo de ello es Cheaf, una aplicación móvil de descarga gratuita, donde restaurantes y comercios ofrecen paquetes de comida en buen estado que, de no venderse al final del día, serían considerados merma.
Esto no solo ayuda a reducir las pérdidas de los restaurantes, si no a mitigar el problema de desperdicio de comida en el país.
Estamos frente lo que podría ser una de las adaptaciones más importantes de los negocios frente a la pandemia, ya que, con el paso del tiempo en confinamiento, estaremos viendo más variedad de aplicaciones que hagan de la entrega de comida a domicilio una forma de supervivencia para los restaurantes, hablando no solo de las cadenas restauranteras, sino también de las PyMEs del país.