Un grupo activista del Comité de Transporte perteneciente a la Junta Comunitaria 7 del Upper West Side en Nueva York se encuentra luchando por uno de los derechos más básicos de los repartidores: el poder pasar al baño. Los activistas quieren comenzar a erradicar un problema sistemático que aqueja a los repartidores de delivery de todo el mundo.
Ligia Guallpa, integrante del Proyecto Justicia Laboral, recalca que la falta de baños para los repartidores en la ciudad de Nueva York es un verdadero problema que se debe solucionar con una nueva reforma legal. “Han servido durante toda esta pandemia, expuestos al riesgo del virus. Muchos se han enfermado de COVID-19 y están afuera aunque haya lluvia, nieve, frío y merecen nuestro respeto”, mencionó el concejal Mark Levine de Manhattan.
Los repartidores de delivery en La Gran Manzana han encontrado en otros latinos una mano amiga. Son los hispanos que trabajan en restaurantes los que le están otorgando la facilidad de pasar al baño a los repartidores de alimentos a domicilio. “Aunque no vengan a recoger comida aquí de los otros, les dejamos usar el baño porque sabemos. Esta comunidad es muy chiquita y bien unida. Nosotros tratamos de mantener la paz”, dijo una trabajadora sobre el tema.
Anteriormente, se han presentado otras iniciativas para que los restaurantes de Nueva York ofrezcan a sus repartidores el acceso a los sanitarios. Son estos trabajadores los que se han encargado de llevar la economía restaurantera en sus hombros durante la pandemia. Se espera que el acceso a los baños en restaurantes sea el primer paso para mejorar las condiciones de los repartidores en la urbe estadounidense.
Vía NY1N, imágenes vía Pixabay.