En safeshopping.news le hemos informado como ningún otro medio o portal sobre el avance, y evidente fracaso, de la Ley Rider en España. Desde su gestión, la cual encontró protestas por miles de repartidores que ya perdieron sus ingresos (más de 15 mil), hasta su implementación, que ha ocasionado la salida de empresas, desincentivado la inversión y ha eliminado la posibilidad de que los repartidores cuenten con ingreso flexible y que se adapte a sus necesidades.
La polémica continúa, recientemente se anunció que el Tribunal Constitucional en España admitió a trámite los recursos de inconstitucionalidad presentados por partidos de oposición contra el decreto de ley relativo a los repartidores de plataformas digitales, es decir, la Ley Rider.
De acuerdo con la nota de prensa emitida por el propio Tribunal Constitucional; “El Pleno del Tribunal Constitucional ha admitido a trámite los recursos de inconstitucionalidad presentados contra el Decreto-ley 9/2021, de 11 de mayo, por el que se modifica el texto refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores aprobado por el Real Decreto Legislativo 2/2015, de 23 de octubre, para garantizar los derechos laborales de las personas dedicadas al reparto en el ámbito de las plataformas digitales. El Tribunal ordena dar traslado de la demanda y documentos presentados al Congreso de los Diputados, al Senado y al Gobierno, para que puedan personarse en el proceso y formular las alegaciones que consideren convenientes”.
Recientemente, Wired, revista mensual estadounidense que existe desde 1993 y portal de tecnología, publicó un reportaje titulado “España tenía un plan para arreglar la economía Gig. NO FUNCIONÓ”, en el cual precisamente aborda el tema de la Ley Rider con testimonios de repartidores contundentes: “Ocho horas al día solían ser suficientes. Ahora tengo que trabajar más para ganar la misma cantidad de dinero. “Todo comenzó con la ‘Ley Rider. Ellos [el gobierno español] dijeron que era lo mejor para nosotros, pero sólo ha hecho que nuestros trabajos sean más precarios”. Ahora, el repartidor de nombre Daniel Freitas dice que está luchando para llegar a fin de mes después de pagar el combustible de su motocicleta, un contador, el IVA y las contribuciones al seguro nacional que ascienden a una tasa mensual fija de 289 euros para los autónomos.
El reportaje retoma la obligada salida de empresas como Deliveroo y su impacto en el ingreso de miles de repartidores: “Estaba tan enojada cuando escuché que [Deliveroo] se iba, es mi mayor fuente de ingresos y luego, de repente, me dijeron que se iba”, dijo Lydia Camargo, una repartidora de 42 años de Madrid que trabajaba con Deliveroo y Glovo. “Esta ley nos está dejando sin nada”.
En safeshopping.news mantenemos nuestro compromiso de seguirle informando sobre el desarrollo de este y otros temas referentes a la economía Gig.