El concepto de autos voladores ha sido el sueño de todo ingeniero, ya que tener dicho artefacto volador que recorra las calles de las principales ciudades del mundo solo se ha visto en películas. Sin embargo, para Francia esto podría dejar ser un sueño próximamente, ya que están desarrollando unos taxis aéreos e incluso ya se están trazando las rutas.
Las próximas Olimpiadas se llevarán a cabo en París, específicamente en 2024. Dicho evento logra reunir a gente de todo el mundo, convirtiendo las ciudades que se vuelven sede en un espacio turístico de alta concentración durante muchas semanas. Dicha demanda de servicios hace que, por momentos, se desate el caos en las principales avenidas que conectan los aeropuertos, hoteles y restaurantes con las zonas turísticas o bien, los sitios donde se llevarán a cabo los juegos.
Para disminuir este congestionamiento vial y también, para ser de las primeras naciones en el mundo en implementar el uso de autos voladores, Francia está desarrollando un par de rutas que serán usadas por taxis voladores, la nueva forma de transporte parisino. Estos trayectos unirán los aeropuertos de París-Charles de Gaulle, Le Bourget y un punto de la ciudad de París aún por determinar. Por otro lado, se contemplan dos suburbios del suroeste de la capital gala, París-Issy-les-Moulineaux y Saint-Cyr-l’École, según lo reportado por Aeroports de Paris.
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Francia ha establecido un centro de pruebas en el aeródromo de Pontoise–Cormeilles-en-Vexin, donde se realizarán las pruebas de aterrizaje y despegue, así como todos los elementos que entrarán en juego para su creación. Para esto último, el gobierno ha seleccionado a una treintena de fabricantes que realizarán las siguientes pruebas: niveles de ruido y vibración que provocan, la integración segura de estos vehículos en el tráfico aéreo convencional del cielo parisino, las necesidades de mantenimiento y recarga para las rutas seleccionadas, ya que los taxis serán completamente eléctricos.
En este momento el gobierno francés tiene poco más de dos años para hacer todas las pruebas necesarias y traer a la realidad los primeros taxis voladores.