Porque usar robots como repartidores en las calles no era suficiente, ahora los habrá también dentro de los aeropuertos en Estados Unidos, pues el Ottobot puede realizar entregas en cualquier punto de estos y así evitar que se produzcan largas filas en los establecimientos.
De acuerdo a Ottonomy, la compañía detrás de estos robots, la finalidad del Ottobot es evitar las aglomeraciones de personas, puesto que con la pandemia de COVID-19 lo esencial es la distancia segura, algo que es difícil de cumplir al momento de estar formado para recibir tus alimentos, bebidas o cualquier otro producto. Y con los aeropuertos siendo las principales vías de ingreso a cualquier parte del mundo, el riesgo de estar junto a un posible portador incrementa demasiado.
Así, Ottobot funciona como un robot mesero, el cual lleva la comida hasta donde el usuario se encuentre. La mecánica es sencilla, pues a través de una aplicación se ordena cualquier bebida o alimento en alguno de los establecimientos que se hallan al interior del aeropuerto. Al momento de estar lista la orden, el robot se pone en marcha y traza la mejor ruta para llegar hasta el comensal. A la par, la persona que hizo el pedido recibe una notificación con la ubicación del Ottobot y un código QR, con el cual podrá obtener sus alimentos.
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Para recorrer sin problemas todo el aeropuerto, el Ottobot incorpora sensores y un módulo LiDAR que permite esquivar los obstáculos que se presenten en su camino. Por ahora las pruebas se están llevando a cabo en el Aeropuerto Internacional de Cincinnati y el resultado de estos meseros robóticos ha sido excepcional, así que su posible llegada a más aeropuertos ya está sobre la mesa.
“Podemos brindar una experiencia segura a través de nuestros Ottobots, ejecutando entregas automatizadas sin contacto de alimentos y bebidas y productos minoristas. El COVID-19 ha cambiado la forma en que todos interactuamos y nos relacionados con los viajes, haciendo que la entrega sin contacto sea aún más relevante”, valora Ritukar Vjay, de Ottonomy Inc.