En 2021 se hizo popular el término non fungible token, NFT en la versión corta. Y aunque en su momento se presumían como una nueva opción para entrar en el mercado del arte, dejando a un lado lo convencional, hoy por hoy sus aplicaciones podrían ir más allá que solamente ser una pieza de arte digital.
Y es que con su popularidad desbordada los NFT tendrán un impacto enorme durante 2022 gracias a su implementación por distintas de las más grandes empresas del mundo, incluso la redes sociales se modifican para permitir el uso de NFT, así que con eso se dice todo.
Sin embargo, un análisis realizado por Manuel Trevilla que fue publicado en El Financiero mira más allá de lo convencional y propone, sin un tiempo especifico de implementación en nuestra vida diaria, cuales serían las distintas aplicaciones que el NFT podría tener en los próximos años.
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Tickets
De acuerdo al análisis, si los boletos para cualquier tipo de actividad se convirtieran en NFT’s los usuarios estarían más seguros, puesto que sería prácticamente imposible hacer una réplica falsa de éste y por ende, se evitarían los fraudes.
Membresías
Esto ya ocurrió, y es que un restaurante de lujo en Nueva York llamado FlyFish está vendiendo NFT’s como si fueran membresías, lo que otorgará acceso a un club privado y muy cotizado, puesto que ya se terminaron sus accesos. Sin embargo, esto empezará a verse más seguido, ya que con el uso de un NFT como membresía se tendría la información del cliente y sería prácticamente inalterable.
Fundrasing político
Algunos candidatos en Estados Unidos ofertaron colecciones de NFT para obtener fondos, y aunque no se sabe el monto exacto, éste puede alcanzar cantidades millonarias que además de beneficiar al político le otorga al donador accesos especiales a eventos organizados por el partido.
Elecciones
La última aplicación de este análisis es que en el futuro las credenciales para votar dejarían de ser usadas ya que se sustituirían por NFT, lo que permitiría incluso que pudieras votar desde tu casa. Y aunque de esta forma se podrían evitar fraudes y el mal uso de las credenciales de los votantes, es un sistema que estaría expuesto a alteraciones y el problema más grande es que la votación tendría que ser transparente, situación que en muchos países es todo lo opuesto.