Como se había advertido desde hace tiempo, las criptomonedas comenzarían a colarse dentro de las economías de las potencias del mundo, por lo que ahora la Gran Bretaña se encuentra trabajando en regulaciones de estas divisas, justo como Estados Unidos y el resto de Europa.
Ante su incontrolable uso en todo el mundo, los gobiernos han tenido que comenzar a crear políticas y medidas que permitan un correcto uso de las criptomonedas, pues existe el temor de que su uso desmedido desestabilice los sistemas financieros y perjudique a los consumidores.
Los partidarios de las monedas digitales sostienen que la nueva tecnología facilitará los pagos y los hará más fáciles y transparentes, mientras que los escépticos temen que sea usada para actividades ilegales como el lavado de dinero y que contribuya a las emisiones de gases debido a la cuantiosa cantidad de electricidad que se necesita para procesar cada transacción.
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“El Reino Unido está abierto para los negocios de las criptomonedas”, declaró John Glen, secretario de asuntos económicos del Tesoro, en un discurso el lunes. Además, el secretario del Tesoro Rishi Sunak le ha pedido a la Royal Mint crear una divisa coleccionable, conocida como NFT.
La medida anunciada por Glen es implementar las stablecoins, monedas que están vinculados al dólar o al oro, por lo cual son más estables que las criptomonedas tradicionales como el bitcoin, cuyo valor suele fluctuar abruptamente.
“Esto les permitirá a los consumidores usar stablecoin para pagar por servicios con tranquilidad”, declaró Glen, aunque no especificó qué tipo stablecoins serán reguladas en su territorio.