SpaceX logró conseguir la aprobación medioambiental de la Administración Federal de Aviación (FAA), por lo que su nave Starship se mudará a Florida para continuar los planes de su lanzamiento al espacio y la eventual conquista de Marte.
Tras varios meses de retrasos y polémicas sobre el daño que provocan los lanzamientos de las naves de SpaceX en las playas públicas, la fauna y flora que rodean el puerto espacial privado de la empresa de exploración espacial, Elon Musk ha logrado salir victorioso en una Declaración de Impacto Ambiental, pero aun requiere una licencia de lanzamiento para los vuelos orbitales.
Esto puede llevar tiempo, por lo que Musk ya tiene en mente trasladar las operaciones de la nave Starship al Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida, donde ya tienen una torre de lanzamiento y lo más importante, todos los permisos necesarios para los lanzamientos orbitales.
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La idea del magnate de los negocios es que se realicen 1,000 vuelos estelares cada dos años, lo que ocurriría una vez que los viajes desde la Tierra hacia Marte sea una realidad, lo que ayudaría a facilitar la primera migración permanente de la humanidad a otro planeta.
Sin embargo, lograr el lanzamiento de tantas naves al año requeriría una coordinación tanto de las bases de Texas, Florida, plataformas marítimas y otros lugares para asentarse realmente en el planeta rojo.