La fibra óptica es usada por gobiernos, empresas y básicamente cualquier servicio que quiera llevar internet a dónde antes no lo había. Sin embargo, existe escasez de este material, lo que complica la expansión del internet en ciertas regiones.
De acuerdo al portal Financial Times, el problema está relacionado con la falta de algunos materiales que son vitales en la fabricación de los cables kilométricos de fibra óptica, tales como el helio y el tetracloruro de silicio.
Esto ocasiona que cuando alguno de estos elementos se consigue, debido a su escasez y alta demanda, el precio por adquirir fibra óptica se eleve considerablemente, dejándolo únicamente al alcance de los sectores con mayor músculo económico.
La falta de fibra óptica en el mundo, especialmente en Europa, se une a la crisis por la falta de microprocesadores, o bien chips, pues debido a la pandemia y la falta de suministros esto afectó en la creación de dispositivos tecnológicos.
Actualmente los cables de fibra óptica se usan en centros de datos, nodos de telecomunicaciones y los cables submarinos intercontinentales.
Y es que este sistema ofrece una conexión a internet más rápida y ya está presente en casi todos lados.
Así pues, la falta de insumos, combinado con la preferencia a las empresas más importantes de tecnología, ocasionará que se retrase la infraestructura de comunicaciones en distintas partes del mundo.
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