La ciudad de Nueva York está experimentando una mala calidad del aire debido a los incendios forestales que han estado ocurriendo en Canadá, cientos de kilómetros al norte.
Este fenómeno ha teñido los cielos neoyorquinos de un color naranja amarillento y ha llevado a la ciudad a tener la peor calidad del aire en comparación con otras ciudades como Tel Aviv, Hanoi, Detroit o Dhaka, según IQAir.
Además de Nueva York, la mala calidad del aire se ha extendido por todo el noreste de Estados Unidos, y se espera que la niebla llegue incluso a los estados de Carolina del Norte y del Sur.
Las autoridades sanitarias han recomendado a la población evitar salir al exterior y realizar actividades al aire libre, y el uso de mascarillas se ha vuelto común nuevamente.
El sector del transporte aéreo también se ha visto afectado, con cientos de retrasos en ocho aeropuertos, incluyendo los de Nueva York, Washington, DC, Filadelfia y Charlotte. El turismo local también ha sufrido debido a la niebla, ya que los turistas se mantienen alejados de los negocios locales.
Nueva York apocalíptico
En Canadá, se han registrado más de 100 incendios forestales, lo que podría convertir este año en el peor en términos de área quemada en la última década, con casi cuatro millones de hectáreas afectadas.
La provincia de Quebec es la más afectada, con más de 150 incendios, lo que ha llevado a la evacuación de decenas de miles de personas y daños en cientos de viviendas. El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha discutido la situación con el presidente estadounidense Joe Biden.
Estas situaciones recuerdan a la calima, el polvo en suspensión que proviene del desierto y tiñe los cielos del sur de España y las Islas Canarias de rojo y naranja.
Este año, la sequía y los ecosistemas frágiles en España han aumentado el riesgo de incendios forestales. Aunque la situación ha mejorado en las últimas semanas, cualquier cambio en las condiciones meteorológicas podría desencadenar nuevamente la preocupación por los incendios.
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